Usted suele dejar mucho tiempo entre
película y película ¿Qué fue lo que le llamó la atención de The Matrix ?
Cuando leí el guión pensé que era increíble, tiene una combinación
alucinante de loca acción, extraordinarios personajes, y temas fantásticos.
Además, los directores Andy y Larry son muy buenas personas.
¿Cómo es su personaje?
Yo
interpreto un personaje muy interesante, se llama Thomas Anderson pero luego es
conocido como Neo. Él es alguien diferente en el mundo que le rodea y por eso es
muy sospechoso. Neo esta buscando algo que le dé sentido a su vida, cree que
Morfeo, el personaje que interpreta Laurence Fishburne, tiene las respuestas a
sus preguntas.
¿Qué es The Matrix?
Es una película
genial. Algo que nunca se ha visto hasta ahora, por el guión, por los efectos
especiales, por el diálogo. Yo disfruté muchísimo haciéndola. Sobre todo por los
aspectos animados de la misma. La historia es una novela gráfica animada donde
se mezcla mitología, filosofía, libros de cómics y mucha
acción.
Todos ustedes necesitaron entrenar
durante cuatro meses ¿Cómo se preparaban para las peleas que se ven en
pantalla?
Hablamos mucho con los directores para saber cómo
querían las peleas, nos lo explicaron hasta en el mas mínimo detalle. Luego
había que aprender a dar ese tipo de golpes, los movimientos y añadirlos al
trabajo en sí. Los golpes que ellos buscaban los llamaban "Calentar la acción".
Eran peleas muy orgánicas, después, cuando estuvimos entrenando y estábamos más
seguros en lo que hacíamos, las peleas se volvían más y más sofisticadas. Fueron
cuatro meses de duro entrenamiento, nos levantábamos a las seis de la mañana y
pasábamos ocho horas haciendo repeticiones y aprendiendo. Hacíamos una hora de
flexibilidad, y luego una hora y media de patadas, después nos daban clase de
Kung Fu. Hay que entender que esta película es pura acción, la audiencia
necesita disfrutar de cada patada, de cada golpe.
¿Fueron peligrosos los
entrenamientos?
Tratábamos de protegernos pero es inevitable
recibir alguna que otra patada o algún que otro golpe. Eso siempre
pasa.
¿Es cierto que tiene obsesión por este
tipo de historias y por los cómics?
A los once o doce años empecé
a leer a Richie Rich, después pasé a los Cuatro Fantásticos, y luego a la
Patrulla X, a partir de ahí mi vida comenzó y mi obsesión por los cómics empezó.
Durante siete años viví absolutamente obsesionado con los libros de cómics.
Estoy muy agradecido al escritor Frank Miller por este personaje, lo
adoro.
¿Parece que le gustó trabajar
con los hermanos Wachowski?
Son los dos directores más creativos,
decentes y divertidos con los que he trabajado nunca. Son grandes artistas.
Escuchan a los actores, una cualidad muy especial, y cuando hablan te explican
bien lo que quieren de ti. Larry tiene las ideas y Andy las lleva a cabo
visualmente. Son dos visionarios del cine del futuro.
Los efectos especiales de la
película son increíbles. ¿Fue difícil adaptarse a ellos como actor?
No
es difícil porque como te digo Larry y Andy te explicaban bien lo que querían. A
veces es muy ambiguo trabajar con efectos, pero en este caso creo que la imagen
que se ve merece la pena, en cada secuencia hay una, cantidad de acción
increíble. Además, se juega mucho con los ángulos de la cámara.
Eres un actor con suerte en la
taquilla. Esta película está resultado un auténtico éxito en los Estados Unidos.
Yo he actuado en películas de mucho éxito como Speed y películas que han
sido un auténtico fracasó como Lunas sin miel lo cual compensa, me da
balance como actor. Ahora The Matrix está resultando un éxito porque la
película lo merece, la acción es buena y el público reacciona ante lo bueno. Es
un filme mucho más artístico que los anteriores. La gente va a
disfrutar.
¿Veremos alguna vez a Keanu
Reeves en una película romántica?
Todas las películas de Hollywood tiene
algo romántico. Yo prefiero las películas que son mas espirituales, donde puedes
perderte en muchos aspectos del amor, y darle a la interpretación un sentido más
sensual, si además es una película romántica, perfecto.
Usted es de esos actores que
parecen escaparse de la escena pública en cuanto termina una película
Sí. Es mi mayor virtud, el escapismo. Muchas veces uno está
atrapado en el mundo del espectáculos y todos quieren saber quién eres. A mí no
me gusta, no me siento cómodo, prefiero tomar soluciones drásticas y alejarme
por completo de la vida pública. Cada uno toma caminos
diferentes.
¿Le gustan las películas de grandes
presupuestos, las películas comerciales?
Yo disfruto con las películas
grandes, los, llamados Filmes de Hollywood. La mayor forma de diversión que hay
es una buena película, las encuentro que son muy necesarias. Quizá a veces me
siento fuera de lugar a la hora de promocionar esas cintas o en cuanto á las
relaciones que hay que llevar a cabo. Pero en realidad, se trata de desarrollar
la fantasía e ir al cine.
Hábleme un poco de su banda de
música Dogstar.
La música es divertida, somos un grupo de amigos al que
nos di- vierte tocar juntos. Nuestro manager es también un amigo. Hacemos buena
música, componemos canciones y los pasamos bien, nada más que eso. Somos una
banda joven que tiene buenas canciones.
¿Prefiere ir con ellos de gira
que interpretar una película?
Llevamos dos años tocando juntos, ya hemos
ido a Europa, a Australia, a Japón, a Malasia, y hemos recorrido toda
Norteamérica. Ha sido una experiencia muy divertida, íbamos a clubes y a locales
pequeños. Ha sido genial. Afortunadamente somos una banda muy unida. Ensayamos
mucho.
¿Qué instrumento es el suyo?.
El bajo. Somos cuatro, en la banda.
¿Y qué hace cuando sus fans le esperan
en el camerino?
La expectación a mí no me gusta, no me gusta que me
persigan, que me atosiguen, muchas veces las personas se vuelven insensibles y
dejan de verte como un ser humano. Sin embargo, cuando no hay intrusismo, puedes
hablar con ellas y pasarlo bien.
Sus relaciones con la prensa han pasado
por periodos de tensión. ¿Le gustan las entrevistas?
No me siento cómodo
hablando de mis sentimientos, de ciertos aspectos de mi vida privada. Siempre me
preguntan muchas cuestiones personales, para alimentar esa ansiedad entre el
público que a mi no me interesa cimentar. Precisamente mi incapacidad para
hablar sobre mí mismo ha sido motivo de burla entre la prensa sinceramente no me
sentía dispuesto a pasar por eso.
¿Es de esos actores que todavía
tienen que pelear para conseguir una película?
Siempre tienes que pelear
para conseguir lo que quieres, por supuesto. Mira, Anthony Quinn, en Un paseo
por las nubes, tuvo que pelear por su papel.