La Estupidez:

Casi Todas Las claves

 

Tras una meteorica carrera como jardinero, el ilustre Trofim Denisovich Lysenko, adalid de la biologia sovietica durante mas aņos de lo que es logicamente concebible, no solo se empecino en proclamar que los genes no existian y que la transmision hereditaria era una mentira burguesa, sino que llevo a cabo toda una revolucion agricola. Consistia, por ejemplo, en hacer pasar los tractores una y otra vez por el mismo lugar para que la siembra fuera mas eficaz -con lo cual destruia las semillas- y en sembrar de lino las tierras cubiertas de nieve. Al comprobarse que no germinaba nada de nada, Lysenko atribuyo la responsabilidad del fracaso a los enemigos del regimen o, lo que es lo mismo, mando a los inocentes agricultores a Siberia. Por supuesto, tal medida fue aplaudida energicamente por Stalin. Lo mas crudo del caso es que Lysenko, El Rasputin de la agronomia, como le habia denominado el New York Times, permanecio al frente del Instituto de Genetica de la URSS hasta 1965.

Este asombroso y prolongado ejercicio de incompetencia define a la perfeccion uno de los 3 principios inmutables que el ilustrador Scott Adams, creador de la conocida tira comica Dilbert, atribuye a la naturaleza humana: La estupidez. Y es que, segun este mordaz autor, el egoismo, la excitacion sexual y lo puramente necio, bobo, memo, simple o majadero -cualquier forma sirve- son cosas que nunca cambiaran, Hagamos lo que hagamos. Tambien hay que tener en cuenta que este autor solo concibe la existencia de dos tipos de personas: las listas y atractivas que leen libros de Dilbert y los otros 6,000 millones de imbeciles que se interponen en su camino.

La estupidez, que la real academia de la lengua espaņola define como una torpeza notable en comprender las cosas, es la cualidad propia del estupido, esto es, un individuo que la misma institucion califica en su primer acepcion como el falto de inteligencia.

Las cosas, por supuesto, son mas complejas. En los pocos estudios cientificos que han abordado este tema se establece una diferencia clara entre el estupido en si y aquellas personas afectadas por una patologia o por un defecto congenito cerebral que les impide integrarse o tomar decisiones correctamente. El estupido posee una mente en perfectas condiciones, pero que le falla por razones historicas, sociales o culturales. Asi, Feldmann, uno de los discipulos de Freud, definio la estupidez como el desconocimiento de las causas de las cosas y la falta de instinto. Nada impide, pues, la existencia de sabios que al mismo tiempo sean estupidos proverbiales y de personas que, aunque posean escasos conocimientos, sean, por puro sentido comun, muy prudentes.

 

 Grandes estudios historicos de la estupidez

 

La estupidez, de hecho, adopta multiples formas. Hay quienes mantienen una inteligencia viva en algunos escenarios cotidianos, pero actuan majaderamente en su trabajo, ante la familia o al hablar, motivados por por algunos de los grandes inspiradores de la boberia: El miedo, los prejuicios, la sensacion de culpabilidad, el orgullo o la envidia.

Analizar la tonteria no es nuevo. El erudito historiador Pedro Voltes seņala en su Historia de la estupidez humana que el autor Teofrasto  de Ereso llamaba la atencion ya en el siglo IV a. de C. sobre la existencia de prototipos humanos en los que abundaban los rasgos de necedad, mezquindan y malicia. Pero fue Sebastian Brant quien con su Nave de los Locos , publicada en 1494, inicio toda una corriente burlesca sobre la estupidez. Cinco siglos mas tarde, Paul Tabory y su Historia natural de la estupidez confirmaban que poco o nada habian cambiado las cosas. Seguian habiendo estupidos, peor aun, cada vez habia mas.

El biologo James F. Welles seņala en su historia de la estupidez que la necedad surge por una corrupcion de los mecanismos encargados de reconocer el entorno. Asi, las personas utilizamos esquemas, esto es, planes cognitivos que nos permiten organizar la informacion. Estos pueden ser buenos  si son apropiados en un contexto o malos si son inadecuados y generan problemas. Por tanto, la estupidez consistiria en modificar innecesariamente un buen esquema obteniendo uno malo o en adquirir uno malo en prejuicio de uno mismo.

Algo asi debio sucederle al radiotelegrafista del Titanic , que hizo callar las seņales de advertencia que le enviaban dos barcos antes del desastre porque se encontraba muy atareado transmitiendo los mensajes festivos de los pasajeros.

 

Los prejuicios e ideologias motivan actos estupidos

 

Lo curioso es que si bien el lenguaje hace posible la comunicacion y soluciona problemas, tambien afecta el punto de vista con el que se prcibe una situacion. A veces, su ambiguedad o un ejercicio de manipulacion puede afectar a las propias creencias de las personas, induciendolas a adoptar posturas estupidas. Ahi tenemos el caso de los Cruzados que, nada menos que con Cristo como bandera, no dudaron en llevar a cabo una carniceria -muchas veces propia- en Tierra santa.

La defensa de las ideologias es tambien un importante desencadenante de la estupidez colectiva, ya que en muchas ocasiones se utilizan para ellos argumentos irracionales. De nuevo, los cruzados ejemplifican como los prejuicios causan casi por sistema conductas estupidas. En el siglo XIV, decidieron atacar de frente las murallas de Nicopolis, muy bien defendidas por los turcos, sencillamente porque se creian superiores al infiel. Por supuesto, mordieron el polvo. Su actitud, ademas, cumple todos los requisitos que la historiadora Barbara Tuchman considera necesarios para definir un episodio historico como estupido: Que el hecho haya sido absurdo incluso para sus contemporaneos; que pudiera haber ocurrido de otra forma nada tonta y que no dependiera de una sola persona, sino que fuera obra de todo un grupo.

Nadie esta a salvo. La estupidez ataca todos los ordenes de la vida, si bien se ceba en lo militar por sus fatales consecuencias. En 1916, los aliados perdieron 10,000 hombresal retomar el fuerte de Douaumont, que ocupaba una posicion estrategica. Lo dejaron tan desprotegido que fue reconquistado por un sargento aleman. Igual de desconcertantes son las declaraciones del general ingles Rees registradas tambien por Pedro Voltes. Tras una desastrosa accion de sus hombres, afirmo: No he visto nunca un alarde de bravura y decision tan magnifico. Segun los informes de los sobrevivientes, apenas ninguno de nuestros soldados llego a las lineas alemanas, !eso es motivar!.

 

La burocracia es un genial caldo de cultivo de tonterias

 

Para desgracia de muchos, la estupidez es mas virulenta en todo lo relacionado con la burocracia. El general C.E. Hudson ilustra un absurdo caso de lucha contra ella. El militar llamo al conmutador de su pueblo para advertir que habia un incendio en su casa. La telefonista intento confirmarlo y llamo al jefe de la policia, que estaba durmiendo. Cuando este aviso a los bomberos, la casa habia ardido y el general tuvo, ademas, que pagar el costo del telefono, que se habia quemado con ella.

Parece que la historia de la civilizacion va unida a la estupidez, precisamente porque somos humanos. Asi que si alguna vez se ha sentido como un majadero, no se preocupe. Al menos lo ha reconocido y ha dado el primer paso para corregir su actitud. Otros estan peor. Recuerde, si no, las palabras del magnate de la comunicacion Ted Turner cuando analiza la penetracion de la estupidez en E.E.U.U. : En este pais vive alguna de la gente mas tonta del planeta, y nosotros lo sabemos.

 

Las cinco leyes fundamentales de la estupidez humana

 

El ya fallecido Carlo M. Cipolla, profesor de ciencias economicas en la universidad de California, Berkeley, y uno de los mayores expertos en la historia de la economia, ha dejado para la posteridad uno de los documentos mas importantes sobre la estupidez humana.

En el, Cipolla describe las cinco grandes premisas que explican la tonteria a la que todos estamos sometidos.

 

1.- Cada uno de nosotros subestima el numero de individuos estupidos que circulan por el mundo.

Las implicaciones de esta afirmacion son devastadoras, ya que algunas personas a las que anteriormente hemos juzgado racionales e inteligentes pueden llegar a ser completamente estupidas. Ademas, dia tras dia, nuestras actividades se ven entorpecidas por individuos estupidos que aparecen subitamente en nuestras vidas y, por supuesto, en los lugares y situaciones mas inoportunos.

 

2.- La probabilidad de que una persona sea estupida es independiente de cualquier otra caracteristica de la misma.

Da igual que hablemos de empleados o de tienda, profesores o Premios Nobel. Da lo mismo si viajamos a Polinesia o a Japon. Por algun misterioso proceso, la naturaleza mantiene un porcentaje de personas estupidas en cualquier orden de la vida.

 

3.- Es estupida una persona que causa un daņo sin obtener al mismo tiempo provecho para si, o incluso obteniendo un perjuicio.

Es imposible explicar porque un estupido hace las cosas que hace, ya que no obtiene beneficio de ello. Ademas, aunque la estupidez puede manifestarse solo en un determinado contexto o en un momento preciso, Cipolla advierte que muchas veces acaba arraigando en la forma de ser de una persona con una connsistencia abrumadora.

 

4.- Las personas no estupidas subestiman siempre el potencial nocivo de los estupidos.

Esta claro que los no estupidos olvidan constantemente que tratar o asociarse con individuos estupidos se manifiesta infaliblemente como un grave error que, ademas, como explica la tercera ley, no beneficia a nadie.

 

5.- El estupido es el tipo de persona mas peligroso que existe.

Por la poca previsibilidad de sus actos, el estupido acaba siendo aun mas peligroso que las personas malvadas. La actitud de estas al menos es mas comprensible: buscan su propio beneficio aunque sea a costa de los demas.

 

Los cuatro tipos humanos

 

De la tercera ley Fundamental de la estupidez se desprende que los seres humanos pertenecemos a una de estas cuatro categorias:

 

Los victimas: Son aquellos que hagan lo que hagan, acaban causandoseun perjuicio y produciendo beneficio a otros.

 

Los inteligentes: Son los que obtienen un beneficio para si mismo y para otros.

 

Los Malvados: Obtienen un beneficio aprovechandose de los demas a su alrededor.

 

Los estupidos: Constituyen todo un elemento caotico. No solo se causan daņo a si mismos, sino que perjudican al resto.

 

Sabios estupidos y martires de la necedad

 

El mayor problema al que se enfrentan los estudiosos de la estupidez no es tanto saber que es sino que la motiva y por que llega a afectar a personajes en principio tan intachables como Victor Hugo, quien tras calificar a Goethe como monstruo y bestia afirmo que de el solo se podia leer Los Bandidos. Cuando se le comento que en realidad habia sido Schiller el autor de la obra, Victor Hugo no dudo en proferir: Lo ven? Goethe ni siquiera fue capaz de escribirlo. Este acto de irreflexiva tozudez responde a una de las causas principales de la majaderia humana: La envidia, un fenomeno que parece afectar principalmente a los inventores. Como muestra, Pedro Voltes nos indica la reaccion del ilustre Jean Bouillaud, fisico de 82 aņos de la academia francesa de las ciencias, que apenas escucho el sonido del fonografo de Edison, salto de su asiento, tomo por el cuello al pobre Du Moncel, encargado de presentar el artefacto, y comenzo a gritar que aquello no era mas que un truco de ventrilocuo. Su tesis: La noble palabra humana no puede ser reemplazada por un metal. Los siguientes 4 casos ilustran como la estupidez afecta a cualquiera, por famoso que sea.

William Thomson: El primer baron Kelvin de Largs, una de las figuras mas respetadas de la ciencia contemporanea, afirmo que los habitantes de marte nos mandaban seņales desde su planeta y que la tierra tenia entre 20 y 100 millones de aņos de antiguedad. Con ello pretendia fastidiar a Darwin.

Carlos II: Pese a su buena salud y a las 13 amantes que mantenia, este rey ingles fue victima de las rencillas profesionales de sus medicos. Estos, ante una indisposicion, no dudaron en sangrarle, ponerle ventosas, administrarle vomitivos, quinina y caldo de polvo de calavera, entre otras lindezas. Fallecio a las 5 dias de empezar el tratamiento.

Aristoteles: Este filosofo Griego, cuyos pensamientos sobre el mundo y la naturaleza se mantuvieron vigentes durante siglos, estaba obsesionado por la idea de que algunos animales se generaban de forma espontanea. Cuando se le hizo saber que tal cosa era falsa, matizo que solo se referia a los insectos.

Isaac Newton: Richard Westfall, biografo de este archiconocido hombre de ciencia, deja caer en sus escritos que Newton debio ser bastante desconsiderado y egoista. Prueba de ello fue su afan por recibir honores y cargos, un ejercicio de soberbia que no le impidio ser victima de la mayor credulidad: dos terceras partes de su tiempo las empleo en escribir doctrinas esotericas.

 

Citas de famosos sobre la estupidez

 

Solo dos cosas son infinitas, el universo y la estupidez, y no estoy seguro de la primera de ellas

Albert Einstein

Nada en el mundo es mas peligroso que la ignorancia sincera y la estupidez consciente

Martin Luther King

Todos nacemos ignorantes, pero uno debe trabajar duro para seguir siendo estupido

Benjamin Franklin